El día 07 de junio del presente año se dio a conocer a través de diversos medios un video en el cual se observa a dos personas, una de ellas llevaba una chaqueta que lo identifica como funcionario del SAG, otro sujeto sin identificación y un tercero que graba el acto, acompañado de tres perros tipo pointer, junto a una jaula de transporte en la cual se encuentra un zorro, aparentemente culpeo o chilla, ambos constituyendo especies protegidas.
En el video se puede apreciar como uno de lo sujetos abre intencionalmente la jaula con la finalidad de entregar al zorro a los tres perros, para que este sea devorado por los mismos. Es del caso que los cánidos se encontraban extasiados, lo cual se puede apreciar por los sonidos que estos emitían, por lo que en el momento que la jaula es abierta, uno de ellos ingresa su cabeza y saca al zorro, despedazándolo juntos a los otros cánidos que se encontraban presentes.
Luego de la decisión del Tribunal de declarar admisible la querella, la Fundación APLA adquiere la calidad de querellante en la investigación judicial en curso. Lo anterior permite tener un rol activo en el proceso judicial, en el cual podrá pedir diligencias, oponerse o apoyar las decisiones del Ministerio Público, y participar hasta en la totalidad del procedimiento.
Los abogados querellantes por la fundación, Francesca Coghlan y Augusto Tello, declararon que: «En el caso concreto, se verificó, el uso de 3 animales de raza canina para matar y despedazar a un zorro con la clara intención de adiestrarlos para cazar distintos tipos de especies por lo que la acción descrita provocó la muerte del zorro, por lo que la figura aplicable entonces corresponde a la del inciso final del señalado artículo 291 bis del Código penal, el cual contempla la pena más grave de delito de maltrato animal. Adicionalmente al tratarse de una especie protegida, se comete un delito relacionado a la ley de caza».
Agregaron que «en relación a los perros, estimamos que se infringe la Ley 21.020 de tenencia responsable que prohíbe el adiestramiento para acrecentar la agresividad de los animales denominados de compañía, por lo que, adicionalmente, solicitamos que se inhabilite de manera perpetua y absoluta la tenencia de animales al responsable. Es menester recordar que nuestro ordenamiento jurídico protege y regula el trato digno que se debe dar a los animales, como seres sintientes que son, encontrándose estos protegidos en distintos cuerpos legales. Esperamos que las sanciones de parte del Tribunal sean ejemplificadoras. Asimismo, solicitamos al SAG que tome las medidas correspondientes contra el funcionario involucrado».